El titular de la central nuclear Ascó I (Tarragona) ha notificado al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), siguiendo el procedimiento establecido, el fallecimiento de un bombero de la brigada contra incendios de la planta, debido a la inhalación de dióxido de carbono proveniente de una descarga de este gas en el edificio eléctrico.
Como consecuencia esta descarga se vieron afectados otros tres trabajadores que se encontraban trabajando en la misma zona del edificio. Estos fueron trasladados al hospital comarcal de Móra d'Ebre con pronóstico leve.
Según se está investigando, el bombero fallecido se había desplazado hasta la cota +35 del edificio eléctrico para socorrer a las personas que se encontraban realizando las labores de mantenimiento del sistema de protección contra incendios y fue en ese momento cuando se produjo la inhalación de dióxido de carbono.
El titular de la instalación desconoce en estos momentos el motivo de la descarga de dióxido de carbono, que se utiliza en el sistema de protección contra incendios.
En el momento de la notificación la central nuclear se encontraba en modo 3 (espera caliente), es decir, estaba el reactor parado y con la temperatura media del refrigerante en valores nominales. La central estaba en proceso de arranque tras la 28ª recarga de combustible que se inició a mediados de octubre.
El CSN, según se establece en sus procedimientos, ha informado a través de su página web de la recepción de notificación de este suceso.
Con la información disponible hasta este momento, se clasifica con nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos (INES).
Como consecuencia esta descarga se vieron afectados otros tres trabajadores que se encontraban trabajando en la misma zona del edificio. Estos fueron trasladados al hospital comarcal de Móra d'Ebre con pronóstico leve.
Según se está investigando, el bombero fallecido se había desplazado hasta la cota +35 del edificio eléctrico para socorrer a las personas que se encontraban realizando las labores de mantenimiento del sistema de protección contra incendios y fue en ese momento cuando se produjo la inhalación de dióxido de carbono.
El titular de la instalación desconoce en estos momentos el motivo de la descarga de dióxido de carbono, que se utiliza en el sistema de protección contra incendios.
En el momento de la notificación la central nuclear se encontraba en modo 3 (espera caliente), es decir, estaba el reactor parado y con la temperatura media del refrigerante en valores nominales. La central estaba en proceso de arranque tras la 28ª recarga de combustible que se inició a mediados de octubre.
El CSN, según se establece en sus procedimientos, ha informado a través de su página web de la recepción de notificación de este suceso.
Con la información disponible hasta este momento, se clasifica con nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos (INES).